La respuesta de Rickyfox es estupenda para explicar cómo influyen las ponderaciones en los resultados de un clasificador, pero tal vez podría interesarte también por qué / cómo necesitaríamos tales ponderaciones en primer lugar (lo cual es más un problema estadístico que puramente de ML).
A veces, los datos observados tienen distribuciones diferentes y necesitamos utilizar ponderaciones muestrales para tenerlo en cuenta. Puede consultar Solon et. al (2015) para obtener más información sobre la importancia de las ponderaciones muestrales para los análisis y el ML (utiliza principalmente algoritmos de la literatura econométrica, pero la lógica es la misma).
La idea es que estas diferencias en las distribuciones crean desequilibrios en las clases y las características. Si no se trata, esto puede afectar al rendimiento de los predictores/clasificadores. Hace poco escribí una entrada en el blog sobre cómo se pueden utilizar estos pesos para mejorar la precisión de algunos algoritmos (presenta un ejemplo con datos de fútbol): https://nc233.com/2018/07/weighting-tricks-for-machine-learning-with-icarus-part-1/
La siguiente imagen muestra un ejemplo de desequilibrio de características: estos equipos del conjunto de datos no se han enfrentado a la misma calidad de oposición (elo). La predicción de los tipos de enfrentamientos menos frecuentes puede mejorarse mediante técnicas de reponderación.
Otro ejemplo de buen uso de las ponderaciones muestrales es el tratamiento de los desequilibrios de clase (normalmente cuando una de las clases es muy rara). Véase por ejemplo lo que se hace por defecto en scikit-learn: http://scikit-learn.org/stable/modules/generated/sklearn.utils.class_weight.compute_sample_weight.html
Por último, a pesar de todas estas razones estadísticas, a veces sólo necesitamos aumentar "manualmente" la importancia de una observación por muy buenas razones, y para ello utilizamos las ponderaciones :)
Referencias
Solon, Gary, Steven J. Haider y Jeffrey M. Wooldridge. "¿Para qué ponderamos?". Revista de recursos humanos 50.2 (2015): 301-316.