Sí. Por dos razones.
Cuando lanzas algo, se ejerce una fuerza sobre ti al igual que tú ejerces una fuerza sobre el objeto que lanzas. El impulso se conserva, por lo que todo el impulso que le das al objeto que lanzas en una dirección, lo ganas del objeto en la dirección opuesta.
La primera razón por la que quieres lanzar algo más pesado es que cuando aplicas una fuerza sobre un objeto más pesado, éste no tendrá tanta aceleración como un objeto más ligero. Así, puedes empujar con la misma fuerza con la que empujarías un objeto más ligero, pero durante más tiempo, ya que el objeto no saldrá volando inmediatamente. Y como aplicaste la misma fuerza pero durante más tiempo, habrás entregado más impulso al objeto que empujaste, y habrás ganado más impulso en la dirección opuesta.
(Cuando estés en apuros, piensa en los extremos: una persona que tira su reloj frente a un empujón de un muro enorme)
La segunda razón por la que quieres lanzar algo más pesado es que cuanto más ligero seas, más rápida será tu velocidad con el impulso ganado en dirección contraria a la que lanzaste el objeto. Al deshacerte de las cosas más pesadas que llevas, será más fácil acelerar con cualquier cantidad de fuerza aplicada: tendrás una mayor velocidad con cualquier impulso que ganes.