Formalizar las pruebas matemáticas para que puedan ser comprobadas y manipuladas por ordenador es una propuesta recurrente, sobre todo en el manifiesto QED (1994). El sitio web Número de diciembre de 2008 de Avisos de la AMS está enteramente dedicado al estado del arte de las pruebas formales; el sitio web de Cameron Freer, vdash.org, ofrece una visión general e informal.
Como matemáticos en activo, ¿cuál es su percepción de las pruebas formales y los asistentes de pruebas interactivos? ¿Están familiarizados con los sistemas actuales? ¿Deberían utilizarse en la enseñanza de las matemáticas?
¿Cuáles son los obstáculos para que la demostración formal se convierta en una herramienta de uso generalizado, además del esfuerzo necesario para construir una biblioteca útil de conocimientos matemáticos actuales?