Consideremos un dominio Ω⊆R2 suficientemente suave, y el valor propio para el laplaciano \begin {align} - \Delta u &= \lambda u &x \in\Omega\\ u &= 0 &x \in \partial \Omega \end {align} Me interesa una relación explícita entre el grupo de simetrías de Ω y la multiplicidad de los valores propios de −Δ La idea es que si tengo una simetría R y una función propia u entonces u(R(x)) será también una función propia con el mismo valor propio. Por ejemplo, en el caso del cuadrado tenemos como grupo de simetría D4 En este caso una base de funciones propias es (para el cuadrado con lados de longitud π ) unm(x,y)=sin(nx)sin(my) por lo que para n≠m tenemos que unm y umn son dos funciones l.i. asociadas al mismo valor propio, y podemos obtener una a partir de la otra con la simetría R:(x,y)→(y,x) Pero no todas las degeneraciones pueden atribuirse a las simetrías, por ejemplo u5,5 y u1,7 están asociados al mismo valor propio, pero no hay simetría entre ellos.
Por otro lado, las simetrías no implican degeneración, por ejemplo para un rectángulo con relación de aspecto que no sea la raíz cuadrada de un racional, el espectro es simple, pero sigue teniendo algunas simetrías Z2×Z2 .
En particular, me gustaría saber si la ausencia de simetrías implica la no degeneración del espectro.